miércoles, 12 de octubre de 2011

Buscando nuevos enemigos

Para muchos no es nada nuevo que los Estados Unidos de América de pronto ponga su mira en alguna región, grupo o país del planeta a quien culpar de desestabilizar el (Des)Orden Mundial en el cual nos encontramos hoy en día.


En alguna época el enemigo declarado fue el eje Berlin-Roma-Tokio, en otra fueron los soviéticos y sus ideas comunistas; y más para nuestros días el terrorismo y el narcotráfico, han sido dos de los elementos considerados como peligros a sus intereses y bajo otro tenor como amenazas al mundo desarrollado y occidental.


Con la caída de Osama Bin Laden y la inminente debilitación del grupo terrorista Al Qaeda, a EUA no le queda de otra mas que buscar nuevos horizontes para iniciar un nuevo escenario de confrontación, en otras palabras, ellos necesitan de la creación de un nuevo enemigo en común sobre el cual vertir todas sus paranoias, aspiraciones militares, debates políticos entre otras intenciones.


Por eso, no nos extrañe que en los próximos meses los discursos políticos estadounidenses se concentren principalmente en la amenaza iraní, las soluciones a la crisis económica que arrastran en los últimos años y sobre reforzar la seguridad fronteriza con México.


Tampoco nos extrañe que en los próximos meses estemos presenciando una nueva intervención en la siempre conflictiva y turbulenta zona de Oriente Medio.