Siendo comprendida de ésta forma, la campeonitis es el conjunto de acciones a la baja que presenta un equipo defensor del título reciente en un nuevo certamen. Un juego a la baja, cansancio, distracciones, falta de ritmo y preparación física adecuada entre otras cosas, son síntomas de ésta enfermedad futbolera.
Cuando un equipo resulta triunfador en una competición tanto a nivel local, nacional o internacional, es comun encontrar que los siguientes juegos a dicha consagración, resulten ser perfectas muestras de que algo esta mal, es decir; pierden concentración, se encuentran sin fondo físico etc, que los lleva irremediablemente a una baja de nivel de juego.
Cabe destacar que no es una enfermedad que se presente en todos los equipos campeones defensores al iniciar una nueva competencia, han existido conjuntos que logran mantener su nivel de juego prácticamente intacto, sin embargo; es más común ser testigos de como las escuadras entran en una etapa de descenso o decadencia en su funcionamiento.
En el caso particular del fútbol mexicano, la campeonitis es un evento que se ha manifestado en casi todos los campeones al iniciar el torneo siguiente e incluso, ha sido ésta tan aguda que el mismo equipo monarca da más pena que gloria al poco tiempo de haberse coronado.
La mala planeación, el corto tiempo de descanso y concentración de la plantilla que resulta triunfadora, el cansancio mental, la pérdida de jugadores clave o la misma falta de ambición al haber conseguido lo máximo días atrás, son los síntomas y el caldo de cultivo que hacen llegar a la campeonitis.
Pocos equipos han logrado eludir o sacudirse éste mal y vuelven a levantar la copa en la siguiente edición de la competencia, sea un torneo nacional o internacional.
En el plano nacional, solo los Pumas de la U.N.A.M. han conseguido ser bicampeones en la historia de los torneos cortos. En el plano internacional, equipos como el Inter de Milán, Barcelona o Manchester United, si han podido repetir campeonatos de forma consecutiva haciendo demostrable que la campeonitis no siempre tiene porqué aparecer de manera inmediata a la consecución de un título.
La campeonitis se cura con el tiempo, pero muchas ocasiones y dados los formatos de competencia esta tarda en desaparecer y cuando eso sucede, ya es muy tarde, el equipo campeón defensor queda eliminado de cualquier probabilidad de pelear por refrendar su corona en la fase de finales.
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