Siempre me he cuestionado el motivo por el cuál no existe al día de hoy un tercer equipo representativo en la capital del Estado de Nuevo León o de otra localidad en la entidad.
Históricamente y desde mucho tiempo atrás los más grandes representantes (por no decir los únicos) equipos de fútbol en el Estado de Nuevo León han sido el Club Monterrey y los Tigres.
De sobra se sabe que ambas instituciones han monopolizado y dividido a la afición regiomontana desde hace ya varias décadas y su rivalidad, es una de las más grandes y pasionales en todo México.
El Monterrey y los Tigres son dos equipos muy sólidos y protagonistas en el máximo circuito futbolístico de nuestro país. En los últimos años incluso han acrecentado su poderío de convocatoria así como sus éxitos deportivos, sin embargo, para una ciudad de cinco millones de habitantes ¿será suficiente sólo contar con dos equipos de fútbol?
Al parecer todo indica que sí, pues es tal el arraigo y la tradición de ambas instituciones entre los habitantes de Nuevo León que muy difícilmente se podría considerar el tener otro equipo en la Primera División Nacional.
Inclusive luce muy poco probable que exista un tercer equipo en la Liga de Expansión (Antes Ascenso), pues todo parece indicar que no sería rentable ni llamativo el tener un representante regiomontano al mediano plazo.
Existió hace algunos años un equipo llamado Gavilanes que jugó pocos partidos en la extinta Liga de Ascenso y que intentó establecerse en Guadalupe, N.L. (zona conurbada de Monterrey). Pero tanto Tigres como Rayados no estuvieron de acuerdo y no vieron con buenos ojos la llegada de un tercer equipo a la entidad que pudiera restarle protagonismo o equilibrio al duopolio felino/rayado.
Los Gavilanes tuvieron que mudarse rápidamente a la ciudad de Nuevo Laredo Tamaulipas donde tampoco lograron mantenerse en la plaza desafortunadamente.
Hoy en día y con la creación de la Liga de Expansión podemos notar que Nuevo León tampoco tendrá representante en dicho formato de competencia. Es de llamar la atención que un estado tan desarrollado y con gran infraestructura deportiva no se anime a colocar un equipo aunque sea en divisiones inferiores. Caso opuesto por ejemplo sería Jalisco, una entidad en donde incluso en algún tiempo militaron hasta 5 equipos en la capital.
¿Porqué una ciudad como Guadalajara de igual tamaño e importancia que Monterrey sí ha contado con varios equipos de fútbol (Guadalajara, Atlas, UdeG, Tecos, Oro) mientras que en Nuevo León parecieran conformarse con solo dos?
Tal vez la respuesta además de la negativa por parte de Tigres y Rayados de que exista un tercer cuadro que "robe" afición es porque el mismo aficionado está muy compenetrado con ambas instituciones.
Incluso si miramos fuera de la Zona Metropolitana de Monterrey nos encontramos con pocas ciudades que podrían albergar un equipo para una Liga secundaria como podría ser Linares al sur del estado.
Sin embargo si Jalisco cuenta con equipo en una ciudad como Tepatitlán o Arandas no veo porqué en Linares no pudiera tener cupo una escuadra nueva.
El tema es interesante y al parecer seguirán pasando los años sin contar con un tercer representante neoleonés desfilando en alguna de las divisiones profesionales de México. Incluso con la alternativa Liga de Balompie recién creada se contempló la posibilidad de que existieran los "Norteños de Monterrey" pero al parecer el proyecto optó por declinar su participación.
Será entonces un tema de arraigo del aficionado ya bien establecido hacia los Rayados o Tigres, la negativa de las directivas de ambas instituciones que niegan la entrada de un tercer equipo, o que el Estado de Nuevo León no cuente con ciudades que justifiquen, arropen y sostengan la llegada de un equipo de fútbol (como sí es el caso de Tamaulipas con varias localidades) el caso es que se vislumbra muy complicado que pueda existir una vía alterna en un mundo muy dividido y competido por el Monterrey y los felinos.
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